Alrededor de las 21:30 horas, de Los Ángeles en jueves, la selección de Nueva Zelanda dejó la ciudad angelina rumbo a Auckland para después volar a Wellington, tras un viaje de más de 15 horas.
ESPN.com viajo juntó al seleccionado, el cual desde su partida y durante todo el vuelo tuvo un trato ´normal´, es decir sin grandes tratos o pedidos especiales.
La mayoría de los jugadores y el técnico viajaron en primera clase, pero al no ser suficientes asientos para todo el equipo, algunos se fueron en la segunda categoría, aún de lujo, pero sin tantas comodidades.
Otra parte de la expedición, como utileros y parte del staff del técnico, viajaron en clase turista.
En alimentos, tampoco hubo peticiones especiales, simplemente seleccionar de la cena y desayuno que se ofreció: por la mañana huevo o fruta y en la noche, pollo o carne... Nada fuera de lo normal.
Sin grandes lujos, sin dispositivo de seguridad y perdidos en el anonimato, los "all white" abordaron en medio de una multitud, que no los esperaba, sino simplemente trataba de montarse al avión. Los que viajaron en primera, curiosamente lo hicieron acompañados de un gran números de periodistas mexicanos.
El vuelo a Auckland desde Los Ángeles dura 13 horas y los locales toman su sede, en Welington a las 11 horas locales, tras el último trayecto, un viaje en avión de 50 minutos. Arribarán casi 12 horas antes que el equipo mexicano.