Aunque el exmatrimonio alcanzó en la pasada primavera un acuerdo económico para culminar su proceso de divorcio y poner fin a más de un año de agrias batallas en los juzgados, el empresario Nicolás Vallejo-Nágera parece no estar dispuesto todavía a enterrar el hacha de guerra en su enfrentamiento con Paulina Rubio, ya que ahora pretende aumentar notablemente la compensación financiera que recibe de ella y, de paso, seguir adelante en sus intentos de hacerse con la custodia total de su hijo Andrea Nicolás.
Como publica el portal de noticias TMZ, el empresario español ha interpuesto un recurso ante un tribunal estadounidense para exigir que el juez ordene una revisión completa del arreglo económico al que ambos llegaron hace meses, justificando su acción con las supuestas irregularidades cometidas por la mexicana a la hora de hacer público su patrimonio. Según alega Colate en su petición escrita, la chica dorada ignoró por completo en su declaración los jugosos beneficios que le reportaría su participación en el famoso formato televisivo ´Factor X´ que se emite en Estados Unidos -además de su presencia en la versión infantil de ´La Voz´ en México-, unos ingresos adicionales que, en su opinión, deberían verse reflejados también en el dinero que mensualmente recibe de ella.
En el caso de que Colate se salga con la suya y convenza al magistrado de la solidez de sus argumentos, los casi 7 000 dólares mensuales que se embolsa cada mes -unos 5 100 euros- podrían verse incrementados notablemente si se certifica que la chica dorada sigue haciéndose de oro gracias a su participación en el popular concurso musical, una posibilidad que, sin embargo, el equipo legal de Paulina rechaza rotundamente al calificar las demandas de su exmarido de "despropósito" y al acusarle de ser un "quejica avaricioso", según informa el citado medio.
Se desconocen las implicaciones que este nuevo recurso judicial podría tener en la apacible vida que lleva actualmente la diva del pop, quien prepara el lanzamiento de su nuevo disco en un clima profesional muy positivo y en medio de la estabilidad personal que le proporciona su romance con Gerardo Bazúa.
No obstante, Paulina es toda una experta a la hora de aislarse por completo de los entresijos de su batalla judicial con su expareja, como demostró al exhibir públicamente su indiferencia por el asunto cuando Colate trató de forzar un examen psicológico para comprobar que no estaba capacitada mentalmente para cuidar de Andrea Nicolás, una solicitud que fue rechazada automáticamente por el tribunal hace escasas semanas.
"He tratado de ser leal con su familia y con mi gente. Estoy muy por encima de ese tipo de cosas y de todo lo demás. Ahora mismo me siento muy poderosa gracias al amor de mi familia y al amor de mi vida, mi hijo, y saco fuerzas gracias a él y a mi amor por la música. Ahora me encuentro en un momento de mi vida en el que me siento feliz y plena", sentenció Paulina en una entrevista con el diario La Opinión.