Hoy es 28 de Noviembre de 2024

El fútbol sudafricano se encuentra en el ojo del huracán, luego que saliera a la luz una investigación de The New York Times acerca del amaño de partidos previo a la Copa del Mundo de Sudáfrica 2010.

El Times, citando un informe de la FIFA señala que la empresa Football 4U, un grupo de Singapur que era la fachada de una asociación para arreglar partidos, se infiltró en la federación de fútbol de Sudáfrica mediante sobornos para tener autoridad para designar árbitros para los partidos amistosos que se realizaron en territorio sudafricano previo al mundial.

De acuerdo al reporte, fueron arreglados "al menos cinco encuentros y posiblemente más", destacando en especial el partido entre Sudáfrica y Guatemala, en el que los locales ganaron por un abultado marcador de 5-0.

Antes de iniciar el partido, la línea de apuesta era de 2.68 goles, señala el The New York Times en su informe, sin embargo a medida que el partido avanzaba se incrementó la línea hasta llegar a 3.48 goles y finalmente rebasar las cuatro anotaciones.

El partido estuvo lleno de marcaciones dudosas del árbitro originario de Níger, Ibrahim Chaibou, quien marcó tres penales por supuestas manos.

El jefe de seguridad de la FIFA, Ralf Mutchske, indicó en una entrevista con FIFA.com el 21 de mayo que "Los encargados de arreglar partidos están tratando de buscar partidos de fútbol que generan un mayor volumen de apuestas, y obviamente, torneos internacionales como la Copa del Mundo están generando esa clase de volumen. Por lo tanto, la Copa del Mundo en general tiene cierto riesgo".

De acuerdo al reporte del Times, Chaibou habría estado ligado a Wilson Raj Perumal, quien actualmente se encuentra preso en Finlandia por arreglar partidos, aunque lo negó durante una entrevista con el rotativo.

"No conozco a este hombre [Perumal]", expresó Chaibou en una entrevista telefónica con el diario. "Nunca he tenido contacto con él".

Sin embargo, en su libro "Kelong Kings", Perumal reconoce haber ofrecido a Chaibou 60,000 dólares por manipular el partido entre Sudáfrica y Guatemala.

Robert Sithole, árbitro asistente, reconoció, de acuerdo al informe de la FIFA citado por el Times, que Chaibou ingresó al Bidvest Bank en Polokwane y que fue testigo de cómo Chaibou depositaba "un fajo grueso" de billetes de 100 dólares, quizás tanto como 100,000 dólares, aunque Sithole no podía estar seguro de la cantidad.

Steve Goddard, ex director de la comisión de árbitros de federación de Sudáfrica, detalla que un hombre le ofreció 3,500 dólares por aceptar los términos de una carta firmada por Perumal, en la que se ofrecía a proporcionar árbitros para los partidos amistosos que se jugaran en territorio sudafricano previo a la Copa del Mundo, pagando sus gastos de viaje, alojamiento, comidas y gastos de los partidos, quitándole esa carga a una federación con problemas financieros.

Si bien Goddard señala haber rechazado la propuesta, la empresa Football 4U firmó un acuerdo para proporcionar árbitros en cinco partidos jugados en Sudáfrica.

Goddard reconoció que el partido entre Nigeria y Corea del Norte, que ganaron los africanos 3-1, también estaba arreglado y que advirtió a los directivos de Estados Unidos y Australia que había un grupo intentando manipular el duelo de preparación que tuvieron previo a su participación en la Copa del Mundo.

"Nunca antes habíamos escuchado nada acerca de esto y no tenemos razón para dudar de la integridad del juego", sentenció Sunil Gulatti, presidente de la federación de Estados Unidos, de acuerdo a The New York Times.

A la fecha, Chaibou se encuentra retirado luego de haber cumplido 45 años de edad, alcanzando el límite que señala la FIFA para el retiro obligatorio, y no es sujeto a investigación ya que el órgano rector del fútbol mundial ha informado que sólo investiga a árbitros activos.

En el 2012, una unidad de élite informó que investigaba posibles casos de corrupción en Sudáfrica, sin embargo el presidente sudafricano, Jacob Zuma, anunció su negativa a investigar el asunto, dejándolo en manos de la FIFA.

A la fecha, de acuerdo al Times, la FIFA ha implementado un plan de vigilancia para la Copa del Mundo de Brasil 2014, designando a 12 oficiales de seguridad para cada estadio, quienes entre otras funciones tienen la obligación de vigilar y dar seguimiento al posible arreglo de partidos.