Hoy es 06 de Octubre de 2024

El papa Francisco lavó los pies de 12 presos y un bebé en la principal prisión de Roma en el Jueves Santo, en un ritual previo a la Pascua que muestra la vocación de servicio del pontífice. Además, les pidió que oraran por él y le ayudaran a limpiarse de su "suciedad".

Mientras los presos lloraban, Francisco se arrodilló, vertió agua de una jarra en cada pie, lo secó y lo besó, para revivir el ritual que Jesús practicó con sus apóstoles antes de su crucifixión.

Los participantes fueron seis hombres de la prisión de Rebibbia y seis reclusas de un centro de detención cercano. Una era una madre con su hijito sobre la falda: Francisco también lavó los pies del niño.

El primer pontífice latinoamericano ha revolucionado la tradición del Jueves Santo lavando los pies de mujeres y de no católicos y viajando a cárceles y hospicios para ancianos. Las reglas del Vaticano decían que el ritual debía practicarse con varones como lo fueron los apóstoles.