Durante estas semanas, se estarán llevando a cabo visorías de alumnos de las escuelas primarias Fernando Ahuatzin y Alfonso N. Urueta, donde 40 niños han sido preseleccionados en varias categorías para participar en la convocatoria del torneo de fútbol de Fundación Bafar.



Los niños en coordinación con los instructores ADN, ya iniciaron la primera de 4 visorías, donde entrenarán para el torneo programado para el 19 y 20 de junio.



En este proceso, los instructores ADN a cargo del área de deportes, el L.E.F. Iván Corral y L.E.F. Salvador Olivas, han gestionado el uso de una deportiva alterna a una de las escuelas donde se imparte ADN así como también, llevan a los niños participantes el equipo necesario para su entrenamiento.



De acuerdo con Deisy Malenn Cárdenas Ramos, Supervisora General del Modelo Fechac - ADN en Camargo, esta actividad ha motivado a los niños en su comportamiento diario y en la disciplina, permitiendo el trabajo en equipo aun perteneciendo dos escuelas diferentes, uniendo y compartiendo sus habilidades dentro del equipo, favoreciendo el sentido de pertenencia del modelo.


El Modelo Fechac ADN "Ampliando el Desarrollo de los Niños" está diseñado para impartirse en escuelas de educación básica (preescolar, primaria y secundaria), opera durante el ciclo escolar a través de implementar un programa de actividades extra escolares con el objetivo de desarrollar capacidades de aprendizaje y habilidades físicas en niños y adolescentes.



Ser parte de ADN significa impulsar a los niños y niñas para que se encuentren desde temprana edad con actividades, retos y logros que les permitan fortalecer su autoestima y autoconocimiento, lo que repercute de manera palpable e inmediata en su desarrollo y crecimiento.


Todos los proyectos impulsados por Fechac son posibles gracias a un modelo de responsabilidad compartida que suma los esfuerzos de los empresarios chihuahuenses, quienes aportan recursos económicos y el trabajo voluntario de 130 consejeros provenientes de organismos empresariales; el Gobierno del estado, que recauda solidariamente las aportaciones a través de su secretaría de Hacienda; el Congreso del Estado, que emite un decreto que permite este mecanismo; y las organizaciones de la sociedad civil, que coinvierten con la Fundación y operan proyectos enfocados en formar una mejor comunidad.