Priístas, panistas, independientes y ciudadanos comunes y corrientes estamos ante un hecho histórico; la debacle de toda una estructura, de un partido enquistado en el poder, de toda una ideología errática de gobernar, en medio de la desacreditación, la disputa por "huesos" e intereses personales ocultos; estamos ante un gesto social puro… la gente salió a votar para cambiar su rumbo, y este escribidor lo dice sin ánimos de cargarse al lado azul, por el contrario, criticar -pero con el ánimo de proponer proactivamente- a todos los involucrados en el quehacer político que debe hacer lo mejor para el beneficio social.

Empecemos: PRI-Gobierno…

La derrota, como ya dijeron algunos actores políticos, tiene nombre y apellido, todos lo sabemos… ¿cómo entender que el camión no te va a llevar al trabajo del que comes y que apenas te da a ganar para pagar fotomultas e impuestos que nisiquiera se utilizan para los fines con el que fueron creados? ¿Cómo entender que las constantes peleas entre políticos no dan como resultado castigos ejemplares a funcionarios que fueron responsables de muertes de personas inocentes? ¿Cómo entender que se está gobernando bien si nisiquiera se puede hablar con los gobernantes que uno eligió en las urnas porque contrario a la política de puertas abiertas los ciudadanos se topan con muros llamados escoltas o guaruras?

El partido aún en el poder, está por entregar muchísimos puestos de elección popular, y con ellos los más importantes en la entidad, pero no es porque los priístas "de abajo" hayan hecho las cosas mal, no señor, los priístas de arriba lo hicieron mal, pero no durante el proceso electoral, sino través de los últimos años, en que se empeñaron simple y llanamente en acomodar a su gente en puestos estratégicos, muchos de ellos sin llenar el perfil; esos priístas que nisiquiera tuvieron el interés de ayudar a los que menos tienen, por el contrario mantener y acrecentar un nivel económico en el que nisiquera se puede sentir lo que significa subirse a un camión, o como ya lo hemos visto, siquiera cuánto cuesta un kilogramo de tortillas!!!.

La debacle la marcó el PRI-Gobierno, desde el inicio del sexenio comenzaron a incrementarse "derechos" que más que derechos suenan, a paga más con menos sueldo… y políticas recaudatorias obligatorias persecutorias como las "fotomultas" que esperemos cambien en este nuevo aire que le llega a todo el estado.

Aunado a ello, toda la disputa jurídica por "bajar" políticamente del aparador a un actor político que venía despedazándose solo mediatica y emocionalmente ante un hecho que la historia de chihuahua y los corazones de toda la ciudadanía nunca olvidará; la tragedia del Aeroshow.

Todo eso, y más, hacen que el PRI hoy entregue los precarios resultados electorales, por falta de un liderazgo realmente político y una visión de negocio personal. Hay solo un priísta que ganó, el priísta que salió a votar por sus necesidades y no por obligación o adulación.

PAN-Gobierno electo:

Javier Corral, por su parte, llega al Poder, de una manera que nisiquiera él esperaba, hasta para él y su equipo de campaña fue sorpresivo el "campanazo" que la gente le hizo dar; que quede claro que fue la ciudadanía la que hizo el trabajo, no él como persona; que le quede bien claro que la gente lo eligió, por cansancio, desesperación, asco político, lo que sea pero no es crédito de él sino de la valentía del pueblo que se venció a sí mismo, cansado de estar tirado en el sillón el día de la elección y preferir ver la TV a votar por algún candidato.

Ahora, Corral, tiene en sus manos hacer lo mismo que hicieron Fox y Calderón durante los 12 años de poder a nivel nacional, o realmente hacer lo contrario y demostrar que cuando él personalmente los criticó, cuando fungía como senador o candidato al CEN del PAN, lo hacía porque sui interés es la ciudadanía y no un espacio político desde el cual hacer críticas sin propuesta política.

Javier Corral, puede hacer un cambio real en Chihuahua, sin necesidad de ser un "Bronco" independiente, y si en sus miras está la Presidencia de la República en el 2018, debe dar más campanazos a favor de los chihuahuenses, quitarle al ciudadano la soga del cuello, la bota en la cabeza, la sed de crecimiento, todas esas necesidades que "los de abajo" viven diariamente.

Pero todo eso, lo podremos ver en los siguientes meses, tiene compromisos ya adquiridos con sus mandones, los ciudadanos, así que el PAN tiene ahora si la oportunidad de vencer o morir, tiene 5 años para poder tener la posibilidad de mantener el poder en Chihuahua o simplemente devolverle la batuta al partido de Plutarco Elías Calles. Si es así, de nada habrá servido el gran esfuerzo ciudadano de vencer el abstencionismo.

Es momento de creer, pero ya no de creer en partidos políticos, sino en nosotros mismos como chihuahuenses, desde la trinchera que nos toque, funcionarios, empresarios, ciudadanos, pero eso se puede lograr simple y sencillamente haciendo reflexión, una vuelta al interior mismo de cada persona, de ahí, si volvemos a nuestra esencia podremos hacer cambios en los ámbitos que necesitamos para apegarnos más al crecimiento y desarrollo, tanto personal como de nuestra sociedad.

Fuera los discursos huecos, es hora de cumplir señores…