El domingo pasado hubo elecciones por la presidencia de Guatemala, país con el que México comparte 965 kilómetros de frontera, que es por la que ingresan los centroamericanos que cruzan el país en busca de llegar a Estados Unidos.
Se presentaron 19 candidatos y ninguno alcanzó el porcentaje necesario para ganar en la primera vuelta y por lo mismo habrá una segunda el domingo 11 de agosto en la que ya solo compiten dos de los candidatos.
La disputa será entre Sandra Torres, del partido Unidad Nacional de la Esperanza (UNE), de corte social demócrata, que fue quien ganó en la primera vuelta con 25.70 % de los votos. En la elección pasada perdió en la segunda vuelta contra Jimmy Morales el actual presidente.
Y el otro candidato va a ser Alejando Giammattei, del partido Vamos, de tendencia centro derecha, quien quedó en segundo lugar con el 13.92 % de los sufragios. Es la cuarta vez que se presenta a una elección presidencial con partidos distintos.
El triunfador en las elecciones de agosto será presidente por el período 2020-2024 que coincide con los años de la presidencia de López Obrador. El gobierno de México tendrá que negociar con él, entre otros temas, la política migratoria.
En la elección del pasado domingo se eligieron también los 160 diputados que integran el Congreso, los 20 diputados del Parlamento Centroamericano y al titular de las 340 corporaciones municipales que tiene el país.
Los posibles votantes eran 8.1 millones y se presentaron a las urnas el 61 % de los mismos, según el Tribunal Supremo Electoral. La participación superó las expectativas.
Esta es la novena elección que se realiza en Guatemala después de la caída de la dictadura y el arribo de la democracia en 1986. En 1994 se firmó el acuerdo de paz entre el gobierno y la guerrilla que puso fin a 15 años de guerra civil.
De los 17 millones de habitantes que tiene nuestro vecino del sur, el 83 % vive entre la pobreza absoluta y extrema de acuerdo a datos de la ONU.
Esta fue la primera elección en la que se permitió votar a los migrantes guatemaltecos empadronados radicados en Estados Unidos, pero su participación fue muy baja según la Coalición de Inmigrantes Guatemaltecos.
Los guatemaltecos consideran que los principales problemas que tiene su país son la corrupción, el desempleo y la inseguridad. A éstos habría que añadir los muy altos niveles de pobreza y la migración.
La presidencia de Jimmy Morales, que deja su cargo el primero de enero, había despertado grandes expectativas en particular en la lucha contra la corrupción, pero su gobierno resultó un fracaso en todos los frentes.
Mi amigo el embajador Gustavo Iruegas (1942-2008) siempre insistía que para México la relación con Guatemala era fundamental y muy compleja. Por la frontera sur pasa el narcotráfico y los migrantes entre otros muchos temas que requieren la colaboración de ambos gobiernos.
Twitter: @RubenAguilar