Empresas distribuidoras de gas licuado de petróleo (LP) decidieron suspender la venta del recurso en cuatro ciudades del norte de Zacatecas, debido a los secuestros que han sufrido sus directivos.
Empresarios de las distribuidoras en ese estado revelaron que la delincuencia organizada ha plagiado a tres directivos, por cuyo rescate han pedido 2 millones de pesos.
Así, ante la nula respuesta del gobierno de Zacatecas, decidieron realizar un paro desde el lunes que afecta los pobladores de Río Grande, Juan Aldama, Miguel Auza y Sombrerete.
Advirtieron que no levantarán el paro hasta que la entidad les garantice las medidas de seguridad necesarias para sus ejecutivos.