El nombramiento de un embajador estadunidense en Mexico ocurrirá en algún momento del primer semestre del año, y hasta el momento hay un solo aspirante. Se trata de Robert Gelbard, ex subsecretario de Estado para asuntos de Narcóticos.

Funcionarios del Departamento de Estado expresaron preocupación por la forma en que el gobierno mexicano pudiera interpretar la demora en el nombramiento del embajador de la administración de Barack Obama, pero también indicaron que hay una constante comunicación con funcionarios mexicanos.

Tradicionalmente, la embajada estadunidense en Mexico es ocupada por un designado político cercano al presidente o por un diplomático de alto nivel, como en su momento lo fueron John Negroponte y Jeffrey Davidow.

En el caso de Gelbard, uno de los consejeros sobre temas internacionales del presidente Obama, es el único que hasta ahora ha hecho saber y cabildeado en realidad por el puesto vacante desde la renuncia de Tony Garza, efectiva con el final del gobierno del ex presidente George W. Bush.

Al menos dos presuntos candidatos, el ex alcalde de Denver y ex secretario de Vivienda, Federico Peña, así como Maria Echaveste, la ex consejera de la Casa Blanca con Bill Clinton, declinaron la oferta. Entre las personas que se han mencionado como posibles candidatos se ha llegado a citar a Julián Nava, que fuera embajador en Mexico con Jimmy Carter y que enfrentó entonces una reacción no muy positiva por parte de la sociedad mexicana.

Gelbard es conocido como un "duro" en terminos del combate al narcotráfico y como tal se distinguió entre 1993 y 1995, cuando fue subsecretario de Estado para Narcóticos y como tal el encargado de trasmitir los mensajes más fuertes en torno al problema. Más recientemente, fue uno de los consejeros de política internacional para la campana de Obama, lo que le da un cierto grado de cercanía con la Casa Blanca.

Sin embargo, a pesar de su activa búsqueda del puesto las cosas no se han decidido en su favor. Pero los sucesivos rechazos de Peña y de Echaveste lo ayudan. La lista de posibles candidatos, aunque en algunos casos menos entusiastas que otros, incluye al actual subsecretario de Estado para América Latina, Tom Shannon, si bien se sabe que éste desearía más bien ser enviado a Brasil o Argentina.

Sin embargo, cualquiera que sea su destino, Shannon permanecerá en su actual puesto por lo menos hasta abril, cuando ocurra la Cumbre de las Américas de Trinidad y Tobago, a la que asistirá Obama y después de la cual se espera será sustituido por uno de los varios aspirantes a la subsecretaría, incluidos el académico Arturo Valenzuela (Universidad de Georgetown) y el asesor de riesgos de McLarty y Asociados, Nelson Cunningham.