Hoy es 28 de Noviembre de 2024

El presidente estadounidense Barack Obama recomendó el lunes al gobierno chino que no censure el contenido de internet, la herramienta que le ayudó a llegar a la Casa Blanca, y que tampoco tenga miedo de recibir un poco de críticas.

Durante un discurso ante estudiantes universitarios en Shanghai, el mandatario se enfocó en los derechos humanos, un tema delicado en las relaciones entre Estados Unidos de China.


Obama trató de encontrar un equilibrio político suavizando sus reconvenciones con palabras de cooperación, encomio y humildad estadounidense.


"Creo que entre más libre fluya la información, más fuerte se vuelve la sociedad, porque entonces los ciudadanos de los países del mundo pueden hacer que sus gobiernos les rindan cuentas", manifestó Obama durante su primera visita como presidente a China. "Pueden empezar a pensar por sí mismos".


Obama viajó después a Beijing para reunirse con el presidente chino Hu Jintao.


El mandatario estadounidense dijo a los estudiantes que pocos problemas globales pueden resolverse a menos que la única superpotencia del mundo y su vigoroso competidor actúan juntos, e insistió: "No buscamos contener el ascenso de China".


Pero en su declaración inicial y en respuestas durante la discusión de varios temas con los estudiantes, Obama habló con franqueza sobre los beneficios de las libertades individuales en un lugar conocido por limitarlas.


"No pretendemos imponer ningún sistema de gobierno a ningún país", dijo Obama. Luego dijo que la libertad de expresión y oración, el acceso libre a la información y la participación política irrestricta no son principios sostenidos únicamente por Estados Unidos. Son, dijo, "derechos universales".


"Soy un gran partidario de no impartir censura", dijo Obama. "Admito que distintos países tienen distintas tradiciones. Puedo decirles que en Estados Unidos, el hecho de tener una internet libre o un acesso sin restricciones a internet es algo que nos refuerza y que creo debería ser promovido", agregó.


Se espera que Obama y Jintao hablen de comercio, cambio climático y temas económicos. Ambos cenaron en la sede del gobierno chino y hablaron sobre la historia de sus respectivos países, además de charlar sobre los desafíos económicos que enfrentan. Tanto Obama como Jintao intercambiaron ideas sobre el papel que juega la educación en el avance de su población.