www.elinstante.com.mx.- El presidente iraní Mahmud Ahmadinejad describió la versión oficial de los ataques del 11 de septiembre como "una gran mentira" usada por Estados Unidos como excusa para iniciar su guerra contra los insurgentes, reportaron el sábado los medios estatales.
El mandatario hizo estas declaraciones en un discurso al personal del ministerio de Inteligencia, en un momento de tensión entre Occidente y Teherán debido al polémico programa nuclear del país.
Las declaraciones demuestran que Irán no tiene intención de suavizar su tono incluso cuando podría recibir fuertes sanciones debido a su rechazo a frenar su programa de enriquecimiento de uranio.
"El 11 de septiembre fue una gran mentira y un pretexto para la guerra contra los terroristas y un preludio para invadir Afganistán", dijo Ahmadinejad, según la televisión estatal. El mandatario describió los ataque como "un complicado escenario y montaje de espionaje".
Ahmadinejad ya puso en entredicho con anterioridad la versión oficial de los ataques del 11 de septiembre, pero esta fue la primera vez que se atrevió a describirla como "una gran mentira".
En 2007, funcionarios en Nueva York rechazaron la solicitud de Ahmadinejad de visitar el lugar de los ataques, en Manhattan. El mandatario se encontraba en la ciudad debido a una reunión de Naciones Unidas. Ahmadinejad también creó polémica cuando durante un discurso en Nueva York dijo que aún han de examinarse las causas y condiciones que llevaron a los ataques, así como quién los provocó.
En ese momento, también dijo a la televisión estatal iraní que los ataques fueron "un resultado de dirigir mal y dirigir de forma inhumana el mundo" por parte de Estados Unidos y que Washington los usó como excusa para atacar a otros.
Ahmadinejad también puso en duda la cifra de 3.000 muertos, asegurando que los estadounidenses nunca publicaron los nombres de las víctimas.
En el aniversario de los ataques en 2007, los nombres de las 2.750 personas que murieron en Nueva York fueron leídos en voz alta durante una ceremonia pública.