Pintar La delgada línea amarilla sobre las carreteras más recónditas del país será el nuevo papel que tomen Damián Alcázar, Joaquín Cosío y Gustavo Sánchez Parra, quienes durante este año se sumarán a la ópera prima de Celso García, la cual contará con la producción de Bertha Navarro y Alejandro Springall.
El relato pondrá en pantalla a un grupo de trabajadores que viajan a lo largo de una carretera antigua que une a dos ciudades mexicanas: "Somos los encargados de pintar la línea amarilla o blanca que parece tan común en las carreteras, ellos se dirigen al desierto y se alejan de sus familias por meses", explicó Damián Alcázar.
"La historia aborda los problemas que enfrentan estos personajes, es muy íntima y profunda, porque no solo se trata de su trabajo al pintar la línea, en esta película veremos accidentes y demás situaciones que deben enfrentar estos hombres lejos de sus hogares", añadió el actor, quien compartirá créditos con grandes amigos.
La delgada línea amarilla fue uno de los once guiones invitados a participar en un taller intensivo que se llevó a cabo hace tres años en Oaxaca, como parte del Laboratorio de Guiones organizado por el Sundance Institute, Ibermedia, Bertha Navarro y el Instituto Mexicano de Cinematografía. Celso García pasó cuatro días en el estado mexicano.
"La historia que ofrece Celso pareciera no ser actual, porque tiene muy poco movimiento, pero es muy interesante, porque todo ocurre en los pequeños momentos de intimidad entre los trabajadores, esos hombres olvidados en las carreteras; es una experiencia dramática que expone la vida de estos personajes", comentó Joaquín Cosío.
"La intención de las películas siempre es lograr un nivel de realidad importante y sé que eso busca la producción. El guión lo leí hace unos años y me sedujo desde el primer momento, porque ofrece personajes a los que les suceden situaciones dramáticamente importantes, el movimiento de los personajes es interno y profundo", añadió el actor.
Según plantea el guión, el grupo de trabajadores parte en una vieja camioneta para cubrir más de 120 kilómetros de asfalto con una delgada línea de pintura amarilla y cuentan con menos de dos semanas para lograrlo: "En este recorrido cada personaje se va a fondo, se trata de descubrirse", adelantó Gustavo Sánchez Parra.
"Estos hombres experimentan la soledad que les da la carretera, se sienten aislados por los kilómetros de asfalto y llegan a lugares donde no hay pobladores, están solos en medio de la nada. Mi personaje descubre cosas buenas de sí y las comparte con sus compañeros", agregó Sánchez Parra sobre el filme que comienza a rodarse en marzo de 2014.
La producción contempla que San Luis Potosí sea uno de los estados en los que tome forma la filmación; de hecho, las primeras pruebas se realizaron en aquella entidad; se prevé que la filmación arranque durante el primer trimestre de este año.
El efecto
Además del viaje interior que realizarán los personajes, la historia incluirá otras temáticas como la migración, pues uno de los personajes se topa con el grupo de trabajadores, mientras toma camino a Estados Unidos, para buscar a su hermano.
Damián, Joaquín y Gustavo comentaron que será un placer trabajar bajo la dirección del joven Celso García, pues se trata de una "promesa del cine", según palabras de Alcázar, quien se caracteriza por apoyar a los nuevos talentos alrededor del continente.