"La conducta es genético-partidista, de la marca PRI; lo mismo la asume sin ningún empacho el presidente de la república que los alcaldes municipales o los gobernadores, es la misma corrupción expresada mediante el tráfico de intereses y el abuso del poder", dijo Mario Vázquez al comentar sobre las vacaciones que el titular de obras públicas del gobierno municipal de Garfio, Gabriel Aude, tomó junto con uno de los principales proveedores del municipio de Chihuahua.
El dirigente estatal del PAN acusó que estos hechos replican exactamente la misma corrupción que del gobierno de Enrique Peña Nieto fue exhibida con el caso de la Casa Blanca y las mansiones que les fueron vendidas a los funcionarios federales por uno de los principales contratistas del gobierno federal, cruda expresión del tráfico de influencias, el conflicto de intereses y el abuso del poder que distingue a la mayoría de los gobiernos del PRI.
" El problema no es que el señor Aude se tome sus vacaciones en compañía de su familia en el lugar que más les plazca, el asunto es primero, que lo hace acompañado de quien es uno de los proveedores más beneficiados por la autoridad municipal en la asignación de obras y segundo que lo hizo mientras una de las obras principales del municipio tiene un considerable retraso de tiempo en su conclusión y su costo se ha elevado por graves errores en su planeación y desarrollo; el problema es que todo ello tiene un marcado tufo de corrupción", señaló.
Finalizó al señalar que por supuesto, Acción Nacional, a través de sus regidores y grupo parlamentario exigirá una amplia explicación a la autoridad municipal sobre estos hechos y solicitará toda la información financiera necesaria para garantizar que no hay involucrados recursos públicos en estos hechos. "Lo del tráfico de influencias y los favoritismos ahí está y lo único que podemos hacer es buscar evitarlos en la asignación de las siguientes obras", puntualizó Vázquez Robles.