El América se cita esta noche con el Herediano con la intención de sanar su orgullo, golpeado por perder 3-0 en el partido de ida de la Liga de Campeones de la Concacaf en el hostil territorio tico.
Buscará, en un partido en el que requiere nuevamente de héroes, como sucedió en la final del Clausura 2013 frente al Cruz Azul, recuperarse de una desventaja de tres goles –o mayor- por segunda ocasión en su historia, en una tarea que luce complicada por la irregularidad que ha demostrado desde que arribó Gustavo Matosas al banquillo. Hoy deberá echar el corazón por delante ante la falta de ideas que ha puesto en evidencia.
Según datos de Ricardo Salazar, columnista de Excélsior, las Águilas jugarán con la historia en su contra, pues únicamente lograron remontar tres goles recibidos en fue la final del torneo Prode 85. Llegó al partido de vuelta con una desventaja de 4-1 y en el Estadio Azteca, logró alargar el enfrentamiento hasta los tiempos extra tras vencer 3-0 en el tiempo regular. Ahí Eduardo Bacas apareció para poner el 4-0 definitivo.
En las anteriores cinco ocasiones que se presentaron condiciones similares, el equipo azulcrema no pudo siquiera igualar el marcador global, a pesar de que siempre cerró la vuelta como local (ver tabla). Prefiere recordar la final ante el Necaxa en el Verano 2002, los octavos de final ante el Flamengo en la Copa Libertadores 2008 y la final del Clausura 2013 ante Cruz Azul, donde sí logró encumbrarse, aunque con desventajas de dos tantos.
Irreconocible en la ida, ausente de grandeza y soberbio por la negativa de iniciar con su mejor hombre Rubens Sambueza, el equipo azulcrema fue vapuleado por un conjunto Florense más efectivo cuando se paró frente al arco defendido por el portero Hugo González, aunque también apoyado en la expulsión de Michael Arroyo. Buscará enterrar ese mal recuerdo con su mejor once disponible.
"Ellos (los jugadores del Herediano) hicieron tres goles, ¿por qué nosotros no podemos hacer tres o más goles en 90 minutos? Revertir el marcador va a ser el primer paso para conseguir grandes glorias", preguntó entusiasmado Osvaldo Martínez, quien confía en que las bajas del lesionado Moisés Muñoz y los lesionados Arroyo y Paolo Goltz serán bien cubiertas.
La idea, abundó Martínez, es evitar un nuevo fracaso como sucedió en 2014 en el que incluso América no avanzó más allá de la primera ronda al ser eliminado por el Alajuelense, por lo que deberán ser pacientes, inteligentes y letales, como no han sido en el semestre. Es un objetivo compartido entre directiva, jugadores y cuerpo técnico participar en el Mundial de Clubes, donde no está desde 2006.