Hoy es 28 de Noviembre de 2024

El América no logra encontrar la regularidad en su juego ni en sus resultados, por lo que tendrá que esperar por lo menos una jornada más para asegurar su clasificación a la liguilla. Ayer, en otra muestra de su inconsistencia, que se puede tomar como una mala señal para encarar la final de la Concachampions ante el Impact de Montreal a media semana, cayó 0-4 ante un Querétaro que se ha acostumbrado a ganar de la mano del técnico Víctor Manuel Vucetich.

Los Gallos se encuentran ya en zona de liguilla y tienen en Ronaldinho a un jugador capaz de poner a sus pies al Estadio Azteca. Ambas aficiones saludaron la entrada del astro brasileño, al minuto 83, celebraron su primer gol, el tercero de los Gallos en el partido, y descorcharon la champaña con su segundo tanto y cuarto en la cuenta del Querétaro, una jugada llena de inteligencia y creatividad de Ronaldinho.

Si bien en los primeros 20 minutos del encuentro se trató de un monólogo de las Águilas, en el que los Gallos no encontraron la forma de salir con el balón controlado desde el fondo debido a una presión constante que iniciaba con los puntas Darío Benedetto y Carlos Darwin Quintero, fueron incapaces de mantener su buen funcionamiento para ser derrocados por un oponente que hiló su cuarta victoria. El proyecto de Gustavo Matosas empieza a acostumbrar regalar chispazos de calidad.

Víctor Manuel Vucetich, sabio y calculador como pocos estrategas en México, no se incomodó nunca con la mayor posesión de balón del cuadro local, confiado en el orden de su zona baja, a la que se sumó la calidad de su cancerbero. La visita esperó paciente a encontrarse con una jugada que le abriera la posibilidad de marcar sin descontrolarse, con la cabeza fría.

Y fue Emanuel Villa quien encontró esa oportunidad que trabajó paciente el equipo visitante, en un balonazo que salió desde la defensa queretana. El delantero peleó con su marca para obtener una falta en una zona ideal para la zurda de Yasser Corona, quien no desaprovechó la opción. El nayarita sacó un chanflazo bien colocado que le dobló la mano al portero Hugo González para poner los cartones 0-1.

La ventaja en manos del Querétaro potencializó sus virtudes y, a la vez, mermó el buen ánimo americanista. El equipo crema, incapaz de volver a controlar el juego, terminó con más actividad dentro de su área que en la de su rival hasta recibir la segunda anotación con la que se cerró el primer tiempo. Siempre inteligentes, sin detalles de lujo, con Sinha como su general, los Gallos tuvieron opciones interesantes para conseguir hasta tres anotaciones más.

Tras avisos del Tito Villa y William da Silva, apreció el joven maravilla Orbelín Pineda, en el minuto 45, para poner el 0-2. Se quitó Orbelín a Goltz como si fuera un muñeco de trapo y firmó un gol de antología.

Para la segunda parte, el descontrol de América se acentuó, por lo que el Querétaro remató su gran tarde con la entrada de Ronaldinho, que selló la goleada con sendos tantos en los minutos 85 y 90, y se echó al Azteca al bolsillo.